En la era digital en la que vivimos, las redes sociales se han convertido en una parte integral de la vida de los estudiantes. Desde mantenerse en contacto con amigos hasta acceder a contenidos de su interés, estas plataformas ofrecen beneficios a rescatar. Sin embargo, es importante promover un uso consciente y equilibrado para evitar la sobreexposición y sus posibles efectos negativos.
Consumo digital en niños y adolescentes
Según el último informe de “RADIOGRAFÍA DIGITAL 2024”, – estudio elaborado por VTR y CRITERIA, que encuesta a 1.000 niños, niñas y adolescentes de todo Chile – el uso de celulares, tablets o computadores parte desde una temprana edad. No obstante, el primer aparato propio se obtiene alrededor de los 9 años.
La mayoría de los padres prefiere que sus hijos se diviertan offline pero la mitad de los adolescentes reconoce no contar con reglas respecto al tiempo que pueden estar conectados a Internet.
Gran parte de los niños, niñas y adolescentes chilenos invierten 4 o más horas diarias en internet realizando actividades de ocio.
Chatear se mantiene como el principal canal de comunicación entre amigos y pares.
Uso de redes sociales
El informe destaca que la red social más utilizada es Youtube, luego vendrían WhatsApp, TikTok e Instagram. Si bien la mayoría de los encuestados declara que utiliza estas redes sociales de manera pasiva, a medida que aumenta la edad habría un mayor involucramiento con estas aplicaciones, interactuando y participando en debates, comentarios y conversaciones.
Ver contenido, chatear con terceras personas e investigar de temas de interés son las actividades que más realizadas en redes sociales.
El 30 de junio se celebró el día de las Redes Sociales: un momento perfecto para reflexionar sobre cómo podemos utilizar estas herramientas de manera positiva y responsable.
¿Cómo educar sobre el uso de las redes sociales?
Compartimos algunos consejos para orientar el uso responsable de estas herramientas:
Establecer límites de tiempo: Es fácil caer en el hábito de desplazarse interminablemente por las redes sociales. Fomenta la práctica de establecer límites de tiempo para el uso de estas plataformas. Pueden utilizar aplicaciones o funciones integradas en sus dispositivos para monitorear y limitar el tiempo que pasan en las redes sociales cada día.
Promover el equilibrio: Anima a equilibrar su tiempo en línea con actividades fuera de la pantalla, como hacer ejercicio, leer un libro o pasar tiempo con amigos y familiares en persona. Ayudarles a encontrar un equilibrio saludable entre el tiempo en línea y fuera de línea contribuirá a su bienestar. En este sentido, limitar el uso de sus celulares en los recreos, fomenta espacios de encuentro y socialización.
Fomentar la reflexión: Es importante educar sobre la importancia de la privacidad en línea y el respeto hacia los demás para ayudar a prevenir situaciones desagradables. Antes de publicar o compartir contenido en las redes sociales, es prioritario que se detengan y reflexionen sobre el impacto que sus publicaciones pueden tener en ellos mismos y en los demás.
Lo que se publica no es la realidad.
Enseñar habilidades digitales: Brinda las habilidades necesarias para utilizar las redes sociales de manera segura y responsable. Esto incluye educar sobre la verificación de la información, la protección de la privacidad en línea y cómo detectar y evitar el acoso cibernético.
Modelar un comportamiento positivo: Como educadores y adultos responsables, es importante que demos ejemplo al utilizar las redes sociales de manera responsable. Esto significa ser conscientes de nuestro propio uso de las redes sociales y mostrar un comportamiento respetuoso y ético en línea.
¿Para qué nos sirven las redes sociales?
Revisemos algunos beneficios que puedes poner en práctica:
Para los docentes, las redes sociales ofrecen una plataforma efectiva para la comunicación y colaboración. Permiten compartir recursos educativos, como artículos, videos y enlaces a sitios web relevantes, de manera rápida y eficiente. Además, facilitan la creación de grupos de discusión donde pueden interactuar y debatir sobre los temas vistos en clase, fomentando un aprendizaje más dinámico y participativo.
Para los estudiantes, el uso de las redes sociales puede enriquecer su experiencia educativa. Estas plataformas proporcionan un espacio donde pueden expresar sus ideas y opiniones, desarrollar habilidades de comunicación y trabajar en proyectos colaborativos. Además, las redes sociales les permiten acceder a una vasta cantidad de información y recursos educativos en línea, ayudándoles a profundizar en los temas de estudio y a encontrar soluciones a sus dudas de manera inmediata.
En el ámbito comunitario, las redes sociales fortalecen la conexión entre la escuela, los estudiantes y sus familias. Los establecimientos pueden utilizar estas plataformas para compartir su sello institucional y mantener informadas a las familias sobre eventos, actividades y noticias relevantes. Esta comunicación constante ayuda a crear una comunidad escolar más unida y comprometida, mejorando la experiencia educativa de todos sus miembros.
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